Es Domingo y vale la pena compartir contigo esta experiencia de un plato estupendo de Bacalao frito y Setas salteadas que preparé en dos partes y quedó además de bonito, muy sabroso. En estas oportunidades que tenemos de comprar en el Supermercado productos de calidad a bajo precio, encontré en los congelados un estuche con dos piezas de Bacalao al punto de Sal, de una marca comercial Gallega. Suficiente para sentir confianza en el producto.
Hemos de tener cuidado con el Pescado Blanco que compramos pues si no está congelado, debemos de revisar el que no contenga Anisakis, en una oportunidad en la pescadería lo encontramos en una Merluza de Pincho, muy fresca, pero… desde ese momento cuidamos lo que compramos y el Bacalao, si estuviera en Salazón no se salva de poder contener el parasito por lo que, debemos congelarlo unos días después de desalar y antes de cocinar.
Así pues, descongelé las piezas del Pescado en la víspera, poniéndolo sobre un colador de acero y manteniéndolo en nevera tapado. De igual manera tenía preparado desde la mañana una bandeja de Setas, Champiñones y Hongos Portobello que se venden recién cortadas y muy limpias.
Basándome en la Receta de Champiñones al Ajillo que tengo publicada en mi E-book “200 Momentos Felices” (puedes ver información de esta publicación en el menú principal de este Blog) los preparé con calma, pues esta preparación, requiere el poner todos los ingredientes y dejar cocinar a fuego bajo.
Unos 20 minutos antes de sentarnos a comer salteé en una sartén con una cucharada de buen Aceite de Oliva Virgen, media Cebolla y medio Pimiento verde, en Juliana, fina, con Sal y Pimienta y al empezar a dorar, retiré a un plato y con ese calor y aceite puse a freír las piezas de Bacalao, las que sequé momentos antes con servilleta de papel y pasé por Harina de Trigo (si tuviera Harina de Garbanzos seguro que queda aún mejor).
Vuelta y vuelta, el Bacalao frito solo necesita algo de calor para hacerse, eso sí requiere de cuidado y mimo, pues se parte o deshace al darle vuelta. Yo comienzo siempre poniéndolo por el lado de la piel, porque suelta sabor y dora muy bien. Un minuto antes de sacarlo, le doy vuelta con cuidado.
Al emplatar, simplemente colocar las Setas salteadas (yo uso un molde de acero), a su lado una “cama” de Cebolla y Pimientos salteados y sobre estos, el Bacalao frito. Eso sí, hay que comerlo de inmediato, sabe mejor estando todo bien caliente. Como entrada, una buena Ensalada de Cangrejo (la que se vende preparada en el Súper está muy buena, en especial la que tiene trozos de Piña) además de mezcla de Canónigos y Rúcula con Vinagreta. Pan y tan, tan…
